Hoy vamos a hablar sobre un fenómeno estudiado por la psicología social llamado efecto Ringelmann o también conocido como holgazanería social.
Maximilien Ringelmann fue un ingeniero agrónomo francés el cual estaba llevando a cabo diferentes investigaciones en el ámbito agrícola con el fin de optimizar el rendimiento al máximo del trabajo animal y humano.
Ringelmann observó que cuando un grupo de personas tiran de una cuerda de forma simultánea y en el mismo sentido, la suma total de la fuerza realizada por el grupo es menor a la suma de la fuerza que cada persona hace de forma individual. Tanto es así, que Ringelmann demostró que cuando más grande era el grupo para realizar una tarea, más disminuye el esfuerzo individual. (Kravitz, D. A., & Martin, B.,1986)
Por ejemplo: 7 sujetos estiran de una cuerda individualmente (uno por uno) y la media de su esfuerzo es de 83.3 Kg, cuando estos pasan a estirar de forma colectiva, a la vez y en el mismo sentido, la media de su esfuerzo se reduce a 65Kg (Para una explicación más detallada, consulta el siguiente enlace: https://www.youtube.com/watch?v=ie86AKyBhPM)
¿Por qué debería de interesarnos esto?
En algún momento de nuestra vida nos encontramos en situaciones en las que debemos de realizar tareas con otras personas, sea en el trabajo o en el ámbito académico. Conocer los factores que nos ayudan a minimizar el efecto Ringelmann nos permitirá ser más eficaces en la realización de ese trabajo grupal.
A partir de los resultados de dicha investigación, otros autores se interesaron por el tema y se han propuesto diferentes variables para decrementar la influencia de dicho efecto:
- Es preferible que trabajemos en grupos de tamaño reducido para realizar una tarea.
- Es conveniente que nos organicemos de forma en la que cada integrante del grupo se responsabilice de una parte de dicho trabajo. Ya que una de las hipótesis explicativas de este efecto es la denominada “dispersión de la responsabilidad” (Ros Guasch, J. A.,2007).
- Ya que una posible explicación del efecto Ringelmann consiste en la tendencia en confiar que los otros integrantes del grupo van a proporcionar el esfuerzo deseado para la tarea común, la motivación se ve disminuida. Motivo por el cual es crucial mantener esa motivación lo más alta posible, por ejemplo, encomendando tareas significativas, que impliquen y motiven intrínsecamente.
- La coordinación entre los compañeros del grupo es importante, ya que este efecto puede deberse también al fallar en coordinar los esfuerzos de cada uno. Por tanto, hay que organizar al grupo y promover mecanismos que informen a este mismo sobre el grado en que se van cumpliendo los objetivos propuestos. (Ingham, A. G et al, 1974).
Gracias a este efecto podemos ver que a veces “más no significa mejor”. Teniendo en cuenta los factores citados anteriormente, podemos aplicarlos en las situaciones cotidianas en las que nos vemos formando parte de un grupo o un equipo. De este modo, podemos maximizar la productividad y también creamos una dinámica más equitativa, ya que prevenimos que alguien “no haga nada” o trabaje solo lo mínimo.
Para ampliar información:
Kravitz, D. A., & Martin, B. (1986). Ringelmann rediscovered: The original article.
Ingham, A. G., Levinger, G., Graves, J., & Peckham, V. (1974). The Ringelmann effect: Studies of group size and group performance. Journal of experimental social psychology, 10(4), 371-384.
Ros Guasch, J. A. (2007). Análisis de roles de trabajo en equipo un enfoque centrado en comportamientos. Universitat Autònoma de Barcelona,
Xavi Ponseti
Col. Nº B-03138